martes, 1 de octubre de 2013

Miguel de Cervantes

Texto del trabajo que presenté en el cole sobre Miguel de Cervantes: Miguel nació en Alcalá, España, en 1547 (murió en 1616), no se sabe exactamente el día, pero se sabe que fue a finales de septiembre o principios de octubre, ya que fue bautizado el 9 de octubre. Él pudo haber nacido el 29 de septiembre, día de San Miguel y de ahí haber recibido su nombre.
Miguel fue uno de los menores de su casa, el sexto de siete hermanos y su familia tuvo muchos problemas económicos. El padre movía con frecuencia a la familia de un lugar a otro tratando de conseguir mejores ingresos.
A los 8 años entró al colegio de los jesuitas, en aquella época la mayoría de los niños no iban a la escuela, pero su padre quería que sus hijos tuvieran una mejor educación. Sus hermanas también sabían leer, cosa que era muy extraña en ésa época.
A los 16 años todavía iba a la escuela y le gustaba muchísimo leer y asistir a representaciones de teatro.
No se sabe si Miguel fue a la Universidad, pero su formación demuestra que fue un hombre muy culto.
A los 22 años decidió hacerse soldado. España estaba luchando contra los moros y en la gran batalla de Lepanto, donde obtuvieron la victoria, Miguel recibió varias heridas, una de ellas en su mano izquierda, por lo que desde ésa época lo llamaron el “manco de Lepanto”. Ya en ese momento había comenzado a escribir algunos poemas y tras la batalla recibió unas cartas que certificaban su valiente actuación, él esperaba poder tener una vida mejor.
Realizó muchos trabajos y en ninguno tuvo suerte. Sus finanzas eran cada día más difíciles y se cree que para ése momento ya estaba escribiendo la primera parte de su obra más importante: “ El ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha ” que fue publicada en 1605, cuando Miguel tenía 58 años.
Diez años después terminó la segunda parte y en ese momento ya había traducciones en Inglés y en Francés de la primera parte.
Escribió muchísimo durante sus últimos años, pero nunca tuvo el suficiente dinero para vivir cómodamente. Aunque ya en esa época se reconocía se ingenio, no se alcanzó a vislumbrar el impacto que tendría su obra como un nuevo estilo literario. Al contrario que su principal personaje, Don Quijote, Miguel nunca pudo escapar de su destino de hidalgo y soldado pobre.

jueves, 17 de enero de 2013

Ecosistema de montaña

Se calcula que alrededor del 23 % de todo el mundo es considerado un ecosistema de montaña. Las montañas proporcionan valiosos recursos naturales y contener claves importantes sobre el pasado de la humanidad. La altitud y la pendiente Un ecosistema de montaña se define primero en función de la pendiente y la elevación. Además de la altitud y la proximidad de los océanos para ayudar a caracterizar el clima. Biodiversidad animal Los ecosistemas de montaña son algunas de las regiones con mayor biodiversidad en el mundo. Treinta y dos por ciento de todas las áreas protegidas se encuentran en las regiones montañosas. Muchos animales raros y en peligro de extinción hacen sus hogares en estos corredores ecológicos especiales. Las especies comunes incluyen cabras montesas, aves de presa, y las llamas. Separadas por valles y picos impasible, los ecosistemas de montaña puede tienden a aislar a ciertas especies que tienen una capacidad de dispersión baja y una tolerancia de hábitats estrechos. En los últimos años, el cambio climático y el calentamiento global en los ecosistemas de montaña han puesto muchos animales autóctonos en peligro. Vegetación Vegetación en las regiones montañosas puede ser similar a la de las tierras bajas, pero con mayor elevación viene una disminución de la vegetación. La mayoría de las montañas de apoyo los ecosistemas forestales en zonas de media a baja altura. Los bosques son muy importantes para los ecosistemas de montaña, ya que mantener la biodiversidad y las industrias humanas como la tala. Sin embargo, los métodos insostenibles de explotación de la madera como la tala y la agricultura de monocultivo representa un peligro importante para el ecosistema. Los bosques nublados son exclusivas de las regiones montañosas y contienen árboles de hoja perenne,helechosy orquídeas. Estos bosques suspendido en una nube constante de lahumedady la niebla puede apoyar algunas de flora más frágiles del mundo y la fauna. Por ejemplo, en México, los bosques nubosos cubren menos del uno por ciento de la tierra, sino que contienen 12% de la flora del país. Eso es más de 3000 especies diferentes. Las condiciones geológicas Los ecosistemas de montaña se formaron durante millones de años por las condiciones geológicas. Escarpadas montañas como los Alpes y el Himalaya son relativamente jóvenes, mientras que los mayores cadenas montañosas como los Montes Apalaches han redondeado asoma a partir de millones de años de erosión. Actividad sísmica y volcánica también juegan un papel importante en los ecosistemas de montaña dando sus características físicas. Ambiente El ambiente de los ecosistemas de montaña extrae lahumedada través de elevación orográfica. Las masas de aire se ven obligados a partir de zonas de baja presión a las zonas de alta presión, la creación de un natural “de la bomba de agua.” La precipitación en forma de lluvia, aguanieve, ynieveen gran medida cuando se produce contra el viento, mientras que el lado de sotavento de una montaña por lo general recibe los niveles más bajos de precipitación. Los glaciares, suelo, aguas

viernes, 28 de septiembre de 2012

Test sobre nutrición

Tests de Ciencias

La nutrición

Test sobre la alimentación, la nutrición, el aparato digestivo y excretor para cuarto de primaria

Cuál es el proceso por el que el cuerpo utiliza los nutrientes para el funcionamiento, el crecimiento y el mantenimiento de sus funciones vitales?
. Alimentación
. Sudoración
. Nutrición
. Circulación
Qué aparato no interviene en la nutrición?
. Digestivo
. Excretor
. Reproductor
. Circulatorio
. Respiratorio
El aparato excretor...
. Transforma los alimentos en nutrientes
. Toma aire aprovechando los gases que necestamos y expulsando los que no se necesitan
. Limpia la sangre de las sustancias de desecho
. Lleva la sangre a todas las partes del organismo
A la transformación de los alimentos en sustancias más simples se denomina...
. Alimentación
. Sudoración
. Digestión
. Nutrición
Qué parte no forma parte del aparato digestivo?
. Boca
. Vejiga
. Intestino
. Higado
. Faringe
La cavidad que permite el paso del bolo alimenticio al esófago es ...
. Intestino delgado
. Estómago
. Hígado
. Faringe
. Páncreas
La parte del sistema digestivo en la que los nutrientes atraviesan sus paredes y pasan a la sangre, es el ...
. Esófago
. Uréteres
. Intestino delgado
. Intestino grueso
Entre los dientes de la boca, los caninos...
. Parten los alimentos
. Desgarran los alimentos
. Trituran los alimentos
. Rompen y trituran los alimentos
En el aparato excretor no tenemos...
. Glándulas sudoríparas
. Sistema urinario
. Esófago
El aparato excretor se encarga de...
. Eliminar la heces
. Eliminar las sustancias de desecho que pasan a la sangre
. Fabricar la bilis
. Producir los jugos gástricos
En el sistema urinario no está...
. Vejiga
. Esófago
. Uréteres
. Uretra
. Riñones
Los riñones ...
. Transportan la orina a la vejiga
. Reciben los restos de los alimentos que no se han digerido
. Almacenan la orina
. Filtran la sangre y la limpian de las sustancias de desecho

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viernes, 11 de mayo de 2012

Esculturas Gijón, texto para mi trabajo

Descripción:
El arte escultórico ha experimentado en las últimas tres décadas profundos cambios. Fruto de ellos ocupa ahora formas y parcelas antes reservadas a otras manifestaciones artísticas, utilizando además materiales que nada tienen que ver con los clásicos mármol, bronce o piedra. Esculturas que desbordan la escala para ocupar espacios voluminosos, como si de grandes edificios se tratara. Que propician espacios interiores sobre los que caminamos o bajo los cuales miramos al exterior o podemos cobijarnos, como ocurre con el Elogio del Horizonte, de Eduardo Chillida.

A partir de los años setenta, se lleva a cabo un intento por dignificar los tan deteriorados espacios urbanos, y creándose una nueva relación entre el arte y el territorio. Las ciudades se llenan de esculturas a cielo abierto, de arte público, en muchas ocasiones no exento de polémicas y conflictos. La escultura se ha insertado en el urbanismo, ayudando a transformar los espacios, acercándolos a los ciudadanos.

Trayectoria

Las obras escultóricas emplazadas en espacios públicos en Gijón, comienzan a implantarse en la última década del siglo XIX. Fue la época del auge del monumento conmemorativo en España, caracterizado por grandes estatuas en bronce, piedra o marmol sobre altos pedestales. De aquella forma de entender la escultura en espacios públicos quedaron en Gijón dos ejemplos: el Monumento a Pelayo de José Mª López y el Monumento a Jovellanos de Manuel Fuxá en 1891.

Esta tendencia continuó en los inicios del siglo XX, incluyendo una variante: el busto, siendo ejemplos representativos de los años 20 el Monumento a Evaristo San Miguel y el Monumento a Manuel Orueta de Emiliano Barral, inaugurado en 1927 y primer intento renovador de la escultura conmemorativa.

El parque de Isabel la Católica, creado en los años 50, acogió un gran número de obras escultóricas, relacionadas en muchos casos con gijoneses ilustres, entre las que destacan: los pintores Evaristo Valle y Nicanor Piñole de Manuel Álvarez Laviada; el industrial Romualdo Alvargonzález Lanquine de Gerardo Zaragoza; el Monumento a Fleming, primero en el mundo dedicado al descubridor de la penicilina, inaugurado en 1955 y realizado por el escultor Manuel Álvarez Laviada y el arquitecto Luis Moya, autores, también, del Monumento a los Héroes del Simancas. Esta es la única obra característica de la monumentalidad franquista que se conserva en Gijón.

En 1970 Ramón Muriedas instala en el Rinconín su Monumento a la Madre del Emigrante, primera obra escultórica de lenguaje moderno instalada en un espacio público de la ciudad. En los años 70 se inauguran, además, el Monumento a César Augusto y varios bustos-retratos dedicados a Dionisio Cifuentes, Calixto Rato, Severo Ochoa, Carlos Prieto y Arturo Arias, realizadas por Francisco González Macias.

Los primeros pasos hacia la renovación de la escultura pública se dieron en Gijón a mediados de los años 80. En los nuevos espacios urbanos se instalaron esculturas caracterizadas por la utilización de nuevos lenguajes plásticos y materiales. Ejemplos de estas nuevas creaciones son la zona de juego del Parque Severo Ochoa, realizado por el Grupo G, Homenaje a la navegación de Vicente Vázquez Canónico y Árbol de la ciencia de Juan Zaratiegui.

La tendencia "modernizadora" se consolida a lo largo de la década de los noventa con un nuevo concepto de escultura, creada para un lugar específico, diseñada para dar una nueva imagen del espacio urbano y recuperando la escala monumental. Obras unidas a importantes operaciones urbanísticas que se encargan a artistas significativos del panorama regional y nacional.

Al Elogio del Horizonte, de Eduardo Chillida, le siguieron el Monumento de la Paz Mundial, de Manuel Arenas, Escalada, de Pablo Maojo, Génesis de Joaquín Rubio Camín, Nordeste, de Joaquín Vaquero Turcios y la ordenación de espacios en la Plaza del Humedal, con el Cubo luminoso en medio arco, obra de Alejandro Mieres.

En La Providencia, se instalaron Paisaje Germinador, de Miguel Ángel Lombardía, y Homenaje a Galileo Galilei XV, de Amadeo Gabino; en el parque del Rinconín los eslabones unidos de Solidaridad, obra de Pepe Noja; y en el Mayán de Tierra, se alzan las Sombras de Luz de Fernando Alba.

Otras esculturas han visto la luz en el umbral de los dos siglos: Evocación, en homenaje al periodista Francisco Carantoña y realizada por J. Rubio Camín; Andarín, de Miquel Navarro; Monumento a la República de Acisclo Manzano y Xaime Quessada; En la memoria-Na memoria, de María Jesús Rodríguez y la Torre de la memoria de Francisco Fresno. A estas obras se unen otras de tendencia figurativa, más tradicionales como Sentimientos de Manuel García Linares o Copulaciones de Pedro Sanjurjo Pieycha, entre otras. En el año 2001 se instaló una obra de Herminio.

El Elogio del Horizonte está concebido a partir de un modelo de pequeño formato, que ha ido «creciendo» hasta alcanzar diez metros de altura y un peso de 500 toneladas. Está realizado en hormigón armado, en el propio emplazamiento, el Cerro de Santa Catalina, a partir de dos pilares que actúan como soportes de una elipse abierta. Con sus brazos acogedores y su cuerpo sólido y, a la vez, liviano, el Elogio parece querer lanzarse a volar. El cielo es el techo de esta casa común, en cuyo interior la música del viento suena. El Elogio del Horizonte es también el elogio de la naturaleza, sobre el promontorio donde hace veinte siglos un pueblo echó raíces y escogió los límites de su hogar.

El Monumento a la Paz Mundial es una escultura de hormigón blanco y complemento de hierro que tiene un peso de veinte toneladas. Sus cinco módulos conforman dos estructuras bien diferenciadas que se cruzan perpendicularmente y se alzan sobre una plataforma circular que representa la Tierra. Los módulos están soportados y unidos mediante cilindros de hierro. Los cinco coinciden en un punto de encuentro, el eje central de la escultura, un lugar para la comunicación.

El título, Génesis, da las pistas necesarias para comprender este grupo escultórico de tres piezas, con seis, cuatro y dos metros de altura, respectivamente, que forman una composición abstracta y muy armónica, de gran rigor constructivo. El hormigón empleado es de color gris y textura lisa, elevado sobre el césped e integrado en el entorno. El jardín es parte de la escultura, como lo es el rumor del agua que se desliza en la fuente cercana o el bullicio de la tarde. Génesis nace cada día en esa hora de encuentro gijonés.

Escalada se compone de varias piezas verticales de chapa de acero, soldadas entre sí y procedentes de la empresa siderúrgica Aceralia. Su vinculación con el Pabellón de Deportes va mucho más allá del mero simbolismo. Esos once metros de altura que el visitante "escala" con la vista se corresponden con la altura de los pilares interiores del edificio, y el color rojo del monolito es idéntico al de las gradas de la pista central. Escalada es como una gran montaña donde la luz se refleja y rompe en mil destellos. Uno de sus laterales está labrado con dientes de sierra, asideros hacia la cumbre, marcas en el largo ascenso...

Nordeste tiene cuatro metros de alto por cinco de ancho y es un inequívoco signo de vinculación entre Gijón -la ciudad-, el mar -el Cantábrico-, y la industria, motor de desarrollo a lo largo del siglo XX. Es Nordeste una estela, un mural. En su estructura alternan las superficies lisas con otras superpuestas, irregulares. Está el acero perforado, quizá para permitir que el viento se recree en ella, cuando la luz colabora, el Nordeste parece recortado sobre el cielo y el mar. Y está el acero oxidado por el paso del tiempo, rojizo y duro, borracho de salitre y compañero de gaviotas que vienen a posarse sobre sus lomos.

El Cubo de Alejandro Mieres es el elemento central de todo un espacio diseñado por el autor. Un cubo luminoso que por las noches cambia regularmente de color es parte de la escultura, la más llamativa, pero no la única. Frente al cubo de vidrio, las gradas, concebidas también como una escultura urbana. Si observamos esas gradas desde las alturas, comprobaremos que Mieres recreó en ellas los surcos de sus cuadros, su lenguaje geométrico. El diseño de este espacio se completa con el pavimento artístico de sus zonas peatonales, realizado por el artista Bernardo Sanjurjo. Franjas ondulantes de distintos colores que contrastan con el gris del suelo.

Galileo Galilei buscaría signos del cielo en la superficie rugosa del Homenaje. El conjunto escultórico, de unos tres metros de altura, está formado por dos estructuras geométricas semicirculares, realizadas en acero cortén y colocadas de forma oblicua. Cada una de esas dos estructuras está compuesta a su vez por planchas unidas mediante soldadura, que se curvan y arquean, y dibujan rutas concéntricas en este mapa que define mil planetas del cosmos de los sueños.

Paisaje Germinador se abre a cualquier lectura. Un ser de magma, un satélite espacial a punto de elevarse, un dinosaurio destartalado y herido, un cíclope que ve mar a través de su único ojo... Escultura sobre pedestal, muy trabajada sin parecerlo, de casi tres metros de altura y situada en zona verde a la sombra de la gran proa-mirador del parque de la Providencia. Una escultura que permite ser tocada. A corta distancia, el Paisaje ofrece detalles insospechados y sus brazos informes le dan aspecto de veleta y brújula.

Sombras de Luz es un conjunto formado por cuatro monumentales planchas rectangulares, de acero cortén y unos cinco metros de altura, dispuestas en posición vertical y orientadas a cada uno de los puntos cardinales. Cada plancha ha sido perforada en círculos de distinto diámetro, por los que penetra la luz y se recrean las sombras. Un juego desde el que contemplar la fachada marítima, o un trozo de ella, según la ventana mágica a la que nos acerquemos. Cuando en los atardeceres el sol se zambulle en el Cantábrico, las planchas de Sombras de Luz toman el color del astro, como recién salidas del horno alto, y proyectan a través de los agujeros su luminosidad de perfiles nítidos, casi entubados. Focos que avisan: comienza el espectáculo.

Formas puras de cilindros anudados. Así se explica desde el punto de vista más material esta escultura que tiene vocación de símbolo. Realizada en acero inoxidable, pesa tres toneladas y media y está formada por cuatro formas cilíndricas a modo de eslabones que se entrelazan. Una cadena que significa unión, pero también libertad, porque los eslabones de esa cadena están abiertos, no pierden su independencia, su autonomía formal. En Solidaridad el acero inoxidable, duro frente a la intemperie, se vuelve de apariencia blanda y moldeable, con un acabado brillante. Solidaridad parece retener la luz y expulsarla a los cuatro vientos.

Andarín es una figura de tres metros de altura, sobre pedestal, realizada en aluminio. Es el conjunto de la unión de elementos geométricos -paralepípedos, cilindros y pirámide- que dan como resultado un esquemático perfil humano, estilizado y ligero, y de formas tan básicas que parece un juguete. El Andarín de Miquel Navarro es abstracto, pero no por ello pierde su imagen de movimiento. Todo en él es geometría, pero no por ello pierde su sentido antropomórfico. Al fin y al cabo, ¿qué es el hombre, sino geometría?

Monumento a la República es un conjunto escultórico de dos piezas realizadas en hierro fundido. Una, circular y de tres metros de diámetro, está asentada sobre una estructura cilíndrica. Sobre su superficie aparecen grabados símbolos que nos trasladan a culturas ancestrales. Nos recuerdan la tradición celta, pero también la milenaria egipcia, la misteriosa maya o las culturas orientales. El segundo elemento es una columna conmemorativa, de formas onduladas que parecen esculpidas por el viento. Observamos en su base el rostro, con forma pero sin rasgos, de una mujer. En la copa, el perfil más figurativo de un pájaro que otea el horizonte.

En la Memoria-Na Memoria es un grupo escultórico formado por dos piezas, pequeños monolitos negros de algo más de dos metros de altura y forma irregular. Están realizados en hierro fundido e instalados en el medio de un pequeño estanque, en buena compañía de juncos y plantas acuáticas de superficie. Son tótems aparentemente desgastados, como fósiles inmóviles. Vegetales hechos piedra y surcados por mil hendiduras. En su base, un lecho de cantos rodados, un mundo de transparencias al alcance del paseante.

Torre de la Memoria proyecta una sombra alargada, que es parte de sí misma. Sus dimensiones contrastan con el entorno: prisma de 16 metros de altura, de hierro y acero, sobre el que se adosan mil pequeños relieves geométricos de acero inoxidable y formas variadas. Torre como un faro interior; o como una chimenea, hermana de las muchas que poblaron el paisaje industrial y que el siglo se encargó de dinamitar. Los relieves sobre su superficie dibujan sin querer signos y rostros, mapas de mundos inexplorados, mensajes que los dioses de la Memoria intentan evitar que olvidemos. Torre que es, además, símbolo de la industrialización gijonesa y recuerdo de la vieja fábrica que durante tanto tiempo funcionó en los terrenos donde hoy se asienta el parque.

Se trata de una pieza de grandes dimensiones, 12 metros, en la que Herminio vuelve a manifestar su preocupación por el equilibrio ingrávido. Es una pieza geométrica basada en un equilibrio aparentemente imposible. La fuerza de la gravedad se equilibra con la fuerza magnética produciendo una obra en tensión. Hay en esta pieza un equilibrio armonioso entre la referencia a un orden constructivo y cierta resonancia orgánica.

La Ciudad de las Esculturas: Gijón

Recogido de turismo Gijón, para mi trabajo de Esculturas: Si visitas Gijón, no te será difícil encontrarte con alguna de las esculturas que habitan en  diferentes puntos de la ciudad llenando de belleza e ideas las diferentes calles y recovecos de Gijón; de diferentes formas y materias,  fechas de creación y estilos,para poder hacer tu propia ruta por La Ciudad de las Esculturas.
Estas obras escultóricas salpican  de arte toda la ciudad; tenemos obras  de los años 90 como El andarín de Miquel Navarro en la Playa del Arbeyal,  el Nordeste de Joaquín Rubio Camín, subiendo el Cerro de Santa Catalina y Sombras de Luz de Fernado Alba en la Playa Mayan. Éstas son obras de gran magnitud, nacidas de  la manipulación de los metales, hierro, aluminio y acero para hacer de una ciudad de industrial como era Gijón,  una ciudad conceptual y se podría decir que con un elemento sugerente común , el color del paso del tiempo. Esas mismas ideas las tenemos con  el Monumento a la República de Zaime Quessada Carlos Max, la Torre de la Memoria en el Parque de Moreda, Escalada frente al Museo del Pueblo de Asturias de Pablo Maojo,…
Pero si de tamaño  hablamos, físico y en fama, se hace necesario nombrar al Elogio del Horizonte, de Eduardo Chillida, que, de manera colosal, se levanta  en el cerro de Santa Catalina entre la urbe y el mar..
Por otra parte,  otras obras escultóricas instaladas son El rey Pelayo en los Jardines de la reina de 1891,  bustos de los pintores Evaristo Valle y Nicanor Piñole de Manuel Álvarez Laviada;  el Monumento a Fleming en 1955, el Monumento a Cesar Augusto y  el Monumento a  José Martí en la Avenida de Juan Carlos I realizada por  Delarra en 1995, entre otros.
La modernización de la ciudad se ha ido gestando al mismo ritmo que su gusto por unas esculturas u otras. El punto de cambio apareció con La madre del emigrante de Ramón  Muriedas en el Rinconín, que se suele considerar como la primera obra escultórica de lenguaje moderno instalada en un espacio público de la ciudad en los años 70.
Además  hay esculturas que no sólo  en materia y forma son sugerentes, sino que hasta con el mismo nombre  marcan un compromiso social en el que se involucra a toda la ciudadanía: Monumento a la Solidaridad en el Rinconín, Monumento de la Paz Mundial, en el parque del Lauderal, por ejemplo.
Serían muchas las que nos faltarían por mencionar pero si decir que, en definitiva, todas estas obras hacen de esta ciudad un paisaje urbano lleno de contrastes y de descubrimiento para quien nos visita. Ven a Gijón, ven a la Ciudad de las Esculturas.

Esculturas urbanas de Gijón

Como tengo que realizar un trabajo para clase estoy buscando información sobre él y he encontrado este vídeo que me puede servir:

jueves, 22 de marzo de 2012

Ejercicio de informática


EL AIRE QUE NO VEMOS
       El aire no se ve a primera vista, pero sabemos que existe porque mece las flores, lo sentimos en nuestra cara cuando hay brisa, y sube alto la cometa que volamos. Es difícil explorarlo pues no lo podemos ver, ni probar, ni tocar.
       Tampoco tiene olor, a pesar de que percibimos el perfume de las flores, el aroma de las comidas y de otras sustancias que viajan a través de él.